14 sept 2023

Las opciones de talleres profesionales de último año de Arquis tuvieron su segundo semestre trabajando dentro de sus diversos enfoques, áreas y trabajos. Es por esto, que escuchamos la visión de diversxs estudiantes acerca de su experiencia en los respectivos talleres, que procesos académicos tuvieron y que les significó de su paso por dicho taller. Esto además, para mostrar a la comunidad estudiantil que se realiza desde otras posiciones de talleres. 

Las experiencia serán contadas por los y las estudiantes de nivel 10 de la carrera:

• Nicolás Villalobos y Sofía Cordero: Taller MAD-ERA

• Julissa Santamaria y Louhana Jimenez: Taller Archivo.Ciudad.Arquitectura 

• Ricardo Cubero y Joshua Mora: Taller Desde el Interior

• Christopher Calvo y Karina Seravalli: Taller Justicia Espacial y Territorios en Rápida Transformación - JETT

MAD-ERA 

Taller a cargo de las personas docentes Mag. Roberto Rivera, Dra. Helga von Breymann, M.Sc. Viviana Paniagua y Lic. David Cubero.

Nicolás Villalobos

Siendo parte del taller de diseño profesional MAD-era, me dejó explorar cualquier cantidad de facetas que tengo como arquitecto pronto a salir. Desde el diseño colaborativo de estructuras 1:1 hasta las investigaciones de materialidad en el mundo de la madera.

La gira al pueblo escondido de Copey de Dota fue ubicación del proyecto de diseño individual. Parte de la experiencia fue desarrollar un conjunto Católico, ya que en en agosto de 2017 se incendió la iglesia de la comunidad. Dejando sin espacio de culto a una gran cantidad de religiosos.

La propuesta se conceptualizó desde una visión pragmática de la construcción y la arquitectura contemporánea, la cual busca la introspección del usuario con geometría sencilla y una organización eficiente del espacio.

Video de la propuesta final 

 

 

 

Sofia Cordero

El taller profesional "MAD-era" ha sido el taller más importante para mi, ya que adquirí bastantes conocimientos nuevos y útiles para el ejercicio profesional de la carrera. En este taller no solo aprendí sobre material que indica su nombre, sino también adquirí muchos conocimientos constructivos en general qué antes no sabía. El taller de MAD-era ha sido el primer taller que me ha obligado a pensar constructivamente mis diseños como si realmente fueran a construirse, pero al mismo tiempo sin limitar la creatividad. Muchas personas se imaginan el taller de MAD-era como un taller de construcción pero no es así, si bien es cierto, da prioridad al uso de la madera y tiene un cierto nivel de exigencia constructiva mayor a los demás talleres, pero aún así es un taller muy integral.

 

 

Archivo.Ciudad.Arquitectura 

Taller a cargo de los docentes M.Sc. José Vargas y M.Sc Luis Durán.

Julissa Santamaria

La palabra que de alguna manera concentra mi experiencia en el último taller podría ser experimentación. Durante este semestre en Archivo. Ciudad. Arquitectura tuve la “libertad” de cuestionar, problematizar, investigar y desarrollar temas y herramientas que desde mi perspectiva actual nutrirán mi futuro profesional y personal. Esta “libertad”, debo acotar, no es total. Para poder experimentar, es decir, realizar un experimento, es necesario reconocer el punto de origen y ejecutar con rigurosidad. El taller tiene objetivos claros y al mismo tiempo no exige a lxs estudiantes a generar un producto arquitectónico específico o tradicional. Esta es una característica que considero valiosa porque se concibe el taller como un espacio donde se extienden y difuminan los límites de la disciplina, pero siempre partiendo de un lugar común: el archivo; considero esto como una de las virtudes de los ejercicios académicos. Agradezco a mis compañerxs por enseñarme, a los profesores por acompañarme y al taller por presentarme diferentes formas de hacer arquitectura.

 

 

Louhana Jimenez 

Este semestre el taller trabajó con los archivos del edificio OMNI,  realizado por el Arq. Álvaro Rojas.

Parte de los objetivos del taller archivo.ciudad.arquitectura  este semestre fue entender cómo un edificio puede ser parte de un archivo, las planimetrías y el relato dado por el arquitecto formaron parte del proceso de experimentación con base en los archivos aportados por los profesores.

Mi trabajo final consistió de una serie de experimentaciones de la forma basados en operaciones morfológicas básicas que son ejecutadas en las primeras etapas del desarrollo de un proyecto arquitectónico. El proceso se trató de la descomposición y recomposición  del edificio para crear diversas variables de la transformación de la forma que mantiene el edificio OMNI. 

El taller abre la puerta a la experimentación y la profundización de temas de interés basados en los archivos, lo interesante de este semestre fue el lidiar con salir de los esquemas de un análisis morfológico utilizados arquetípicamente en la carrera y explorar mediante un lenguaje matemático para representar con claridad el proceso trabajado durante el semestre.

Para esta entrega final y como cierre de talleres, logré comprender el papel que tiene cada arquitectx durante el proceso de concepción de la forma y la importancia que tiene la forma más allá de lo estético con respecto a su contexto y su incidencia dentro del espacio interno. El proyecto fue nombrado "Composición mutable" porque representó una muestra de muchas de las variables que podría tener la forma sometida a únicamente la sustracción, adición, multiplicación y division de volúmenes basados en su forma inicial.

La posibilidad de tomar formatos de entrega usuales en la carrera para representar un proceso de experimentación con su respectiva complejidad y el valor de la escritura para la claridad de ideas y procesos es un aporte importante del taller para la escuela porque logra demostrar la amplitud de trabajo que tiene la disciplina y que el diseño y en el entendimiento del espacio y su contexto no siempre es sinónimo del cumplimiento de una serie de entregables para la realización de un proyecto de carácter arquitectónico.

 

 

Desde el Interior

Taller a cargo de las docentes Mag. Andrea Sancho y M.Ed. Alejandra Brenes

Ricardo Cubero 

Mi experiencia en el taller de diseño profesional “Desde el interior” fue muy enriquecedora y gratificante en muchos aspectos, trabajar en equipo con futuras colegas, creó un espacio para inspirarnos y aprender juntxs, además de la libertad creativa y el acompañamiento por parte de las profesoras. Durante el semestre tuvimos la oportunidad de experimentar con biomateriales lo cual me generó una visión más amplia con respecto a la aplicación de estos en futuros proyectos, además la importancia de la innovación y sostenibilidad en el diseño. En el taller pude profundizar acerca del diseño interno, sus acabados, iluminación y especificaciones técnicas, donde además tuve la oportunidad de aplicar conocimientos multidisciplinarios en la arquitectura y como la moda y la construcción de la identidad de marca propia en el proyecto. 

 

 

Joshua Mora

En el taller de diseño “Desde el interior“ tuvimos la oportunidad de generar una propuesta de diseño enfocada en el usuario, buscando soluciones a sus necesidades más complejas para lograr un espacio adaptado y personalizado. 

La experiencia de trabajo estuvo cargada de retos como el diseño colaborativo, en donde la comunicación y la negociación es vital para sacar adelante el proyecto de diseño. 

El taller aborda diversas temáticas que necesitan ser profundizadas en el quehacer de la arquitectura, como el amor por el detalle, la especificación técnica, la sostenibilidad, y el diseño enfocado en el ser humano. 

Todo esto lleva a propuestas de diseño integrales, que nos permiten a las personas estudiantes profundizar más y estar mejor preparados para un contexto laboral real. 

Considero que el enfoque de este taller, es un elemento necesario en el desarrollo académico y la información aprendida es sumamente valiosa.

 

 

Justicia Espacial y Territorios en Rápida Transformación (JETT)

Taller  a cargo de los docentes M.Sc. Sebastián Alfaro y M.Sc. Michael Smith.

Christopher Calvo

En la Escuela nos han enseñado que los arquitectos lo deben saber todo y que los “grandes diseños” deberían ser nuestra mayor o única aspiración. Pero en Santa Teresa hemos descubierto que no existen peores injusticias que las provocadas por una arquitectura que viene del ego. 

El trabajo realizado en comunidades es difícil, pero específicamente en Santa Teresa ha sido aún más complicado. Existen fuertes tensiones sociales y políticas que han desgastado la fe de las personas en las instituciones, sin embargo, estoy sumamente agradecido por todo el respeto y amabilidad con la que han recibido al equipo. 

El taller, al no partir de ensayos ficticios, fue una fuerte dosis de realidad, que dentro de las paredes de Arquis sería imposible experimentar. La constante acción/reflexión que se vive al trabajar con comunidades es indispensable, una absoluta responsabilidad ética y científica nos enseñó que no se trata de ir a experimentar con personas y que el conocimiento más valioso se construye entre todos. 

El proceso dentro del taller ha abierto la posibilidad de debatir y repensar sobre las formas convencionales de cómo se crea y diseña el espacio. La humildad que brinda poder trabajar en conjunto a una comunidad tan activa y con serias dificultades, pero con tantas ganas de salir adelante, me ha permitido descubrir y reconocer que el verdadero valor de la arquitectura yace en las personas, y que la única forma en la que se debería de construir debería ser en colectivo.   

 

 

Karina Seravalli 

Taller de diseño JETT ha sido una experiencia totalmente fuera de la zona de confort, este ha sido un taller en donde he aprendido a lidiar con la realidad, no desde la subjetividad, “lo que yo creo”, sino con situaciones y necesidades reales, con personas reales, así como en afrontar y entender la realidad de las zonas costeras de Costa Rica y el cómo estos territorios han crecido de una manera descontrolada e injusta. 

El trabajo en equipo y la participación comunitaria es la columna vertebral de este taller. Ha sido una responsabilidad bastante grande, que me ha enseñado a trabajar de manera horizontal con la comunidad, aprendiendo de otras personas que se encuentran bastante lejos de la arquitectura como profesión. He aprendido a respetar y aprovechar los saberes y aportes de las personas de la comunidad. 

Si tengo que ser sincera, ha sido difícil, se trabaja bastante, ya que hay muchas tareas paralelas, pero existe una satisfacción tan sincera, al haber trabajado tantas horas y luego ir a compartir ese trabajo con la comunidad y recibir una crítica por parte de ellos, indiferentemente de que sea positiva o negativa. Como dije, ha sido difícil por ser una experiencia completamente nueva, ya que, desde mi experiencia, en ningún otro taller de diseño se nos ha preparado para enfrentar hechos reales. JETT es un taller en donde se prioriza el proceso de participación, así como el derecho y capacidad que tienen las personas a la toma de decisiones respecto a su territorio, más que solo generar el resultado arquitectónico esperado. 

Este es mi segundo semestre en JETT y lo que más me ha enseñado el taller es el compromiso, el respeto y agradecimiento hacia las personas, y por supuesto, el haber aprendido a trabajar con y para la comunidad.